Luego de que unas cincuenta familias ocuparan ilegalmente espacios verdes en el barrio Bischof entre el domingo y ayer, la Justicia actuó de oficio y podría ordenar el desalojo. La Policía dispuso consignas para evitar que se ingresen materiales para armar casillas y prevenir nuevas usurpaciones. La gobernadora Fabiana Ríos cuestionó las ocupaciones, pero se opuso a la judicialización del asunto.
(22/01/2008) RIO GRANDE - El arribo de los "okupas" a los dos lotes, macizo 73 y 74 del barrio Bishop, comenzó en la jornada del domingo, en la cual se delimitaron terrenos en casi la totalidad, situación que motivó la inmediata presencia de autoridades policiales a fin de evitar el continuo ingreso de personas y materiales.
En tal sentido solo una casilla llegó a instalarse en el lugar, mientras otra estructura fue precariamente levantada, hasta que la consigna policial impidió el ingreso de materiales o cualquier estructura que generara un establecimiento ilegal de viviendas.
La Municipalidad de Río Grande en la jornada de ayer buscó presentar una denuncia penal en tal sentido, pero el secretario de Obras Públicas, Julio Bogado, fue notificado de que efectivamente la situación ya había sido tomada de oficio por parte de la fiscal en feria, la Dra. Cecilia Incardona.
Respecto de una resolución de desalojo de las precarias instalaciones en el lugar, a lo largo de la jornada de lunes los ocupantes del predio estuvieron en vilo a la espera de su posible salida.
"No tenemos alternativas"
Uno de los asentados en el lugar es Javier, un joven que desmintió que se trate de un operativo organizado: "El tema es que yo necesito un lugar para hacer mi casa. Me instalé y levanté unos paneles parea hacer mi casa, y así la gente se fue acercando y comenzó a cercar con hilos, pero quiero desmentir lo que dicen que estamos organizados, porque yo vine acá por mi mujer y mis tres hijos, después todos sabemos que estamos haciendo algo que está mal y todos estamos juntos para buscar una posibilidad de arreglar esta situación".
Sobre la ausencia de funcionarios en el lugar, ya que al mediodía de ayer solo se había realizado un relevamiento social, los usurpadores reclamaron: "Queremos que Municipalidad o Gobierno nos escuchen, no que nos anoten en Tierras para esperar 10 años más, o para que nos paguen un alquiler o dar una bolsa comunitaria".
Finalmente, y en cuanto a la posibilidad latente de un desalojo, Javier expresó: "No nos vamos a enfrentar con la fuerza pública, pero no tengo alternativas, no nos dan solución y vamos a tener que buscar otros lugares, igualmente no estamos usurpando porque acá no había nada, yo solo tomé una porción de tierra del Estado", para agregar finalmente: "Sabemos que estamos haciendo macanas pero la necesidad la tenemos todos".
Los vivos que nunca faltan
Más allá de la posible necesidad de algunas de las personas instaladas en el lugar, también son de destacar algunos casos que podían evidenciarse ayer en este lugar, como el de un ex convicto que aparentaba cierto grado de manejo en el movimiento de personas en el lugar, mediante un teléfono celular.
Este individuo está ciertamente vinculado a un sector político definido, y llamativamente también aparece en este asentamiento cuando el año pasado se hacía ver también junto a las personas que habían ocupado tierras en la Margen Sur.
El sujeto que presuntamente asegura "no tener donde vivir", teóricamente ocupaba un predio en la zona de Margen Sur, por lo que parece haber cambiado su lugar de asentamiento por uno mas "céntrico".
