La derrota no es exclusiva de los "Kirchner" también sus socios y aliados comparten esa derrota, es decir los Senadores, los diputados y el gobierno de la provincia, con Fabiana Ríos a la cabeza, pierden.

Colazo porque pese a que fue el propio kirchnerismo quien tras socavar su gestión lo terminó echando sin piedad del gobierno. Aún no se comprende muy bien cuales son los verdaderos intereses que ata a los verdugos con el victimario, pero lo cierto es que lejos de reprocharle al kirchnerismo haberle prendido fuego a su gobierno, Colazo se transformó en un aliado incondicional, es por eso que ante una segura derrota del kirchnerismo, también será una derrota del propio Colazo, quien además tiene jugadas todas sus fichas en la pareja presidencial.

Algo parecido sucede con los Senadores del ex ARI devenidos a kirchneristas, si bien políticamente ambos senadores (Martínez y Belous) tienen pésimas chance de cara al futuro, ambos forman parte también del tanden de los derrotados, lo mismos sucede en diputados. Por último el gobierno de Fabiana Ríos quien ató la suerte de su gestión al acuerdo "económico" con la Nación, también pierde.

Hay una cuestión a tener en cuenta, la perdida de la mayoría automática del kirchnerismo en el Congreso, abre un interrogate muy grande de cara al futuro, ¿los Kirchner eligieron bien sus aliados ocasionales? ¿Qué pasaría si mañana el peronismo disidente acuerda con los Kirchner y en lugar de andar haciendo equilibrio con los números de voluntades, le sobran manos levantadas? ¿Seguirá en pie el romance que une a la provincia con el Poder central? ¿o volverán las denuncia de la corrupción kirchnerista?.

En el mundo de la política lo imposible se torna predecible, o alguien pensó por estos momentos que un Menem totalmente devaluado y denostado por el kirchnerismo, termina siendo un aliado "ocasional", que le permitió sobrevivir en la sesión de ayer.

La dinámica con que cambia el escenario político puede desandar una mala pasada a quienes desesperado por sobreponerse a una situación, se abrazan a una causa, incluso ajena.

Lo cierto es que el kirchnerismo viene en decadencia y esto no es una novedad, de la misma forma que Fabiana Ríos perdió en las últimas elecciones generales, el kirchnerismo viene perdiendo espacio a pasos agigantados. Hoy el frente anti "K" que se construyo en el Congreso, seduce a más de un dirigente de diversa corriente, en nuestra provincia, el peronismo cavernáculo parece quedar encerrado en una disyuntiva difícil de resolver.

Manfredotti, Milin y Bertone los peronistas que esperan

De los tres dirigentes con posibilidades concretas de representar al peronismo en las próximas elecciones, Manfredotti es el único que no se defino como "kirchnerista", es más, si hoy le piden una definición al ex gobernador, apuesta más con sus fichas del lado de Duhalde que del santacruceño.

Tanto Roxana Bertone como "Milin" Fernández sus esfuerzos son denodados para mostrarse al lado de los Kirchner, aunque últimamente ambos dirigentes, prefieren ignorar el padrinazgo buscando tener un perfil bajo.

"La interna del justicialismo se dirime entre Kirchneristas y Duhaldistas sostiene uno de los laderos del legislador Fernández, por mientras desde el búnker de Roxana Bertone, no hablan de internas, "nosotros creemos en el consenso y en las posibilidad histórica que tiene el peronismo de ir todos unidos a recuperar los espacios perdidos" dicen mientras alimentan la candidatura de la diputada.

Abra que esperar, el kirchnerismo pasa por uno de sus peores momentos políticos, la presidente Cristina sigue descendiendo en las encuestas. Abra que ver cuantos leales quedan, cuando se pase revista después de la tormenta.